Descalabro mercantil y ética agustiniana: la medicación de la triaca según el Guzmán de Alfarache (1599-1604) y los reformadores mercantilistas de la época

«El deseo del mercader es el universal de todos […]. Bien se sabe ser el trato bueno y poderse bien usar aunque con gran dificultad, mas esta dificultad causa que en efecto nunca se use bien dello»
Tomás de Mercado, Suma de tratos y contratos, Sevilla, 1571.

1Gracias, en particular, a los certeros comentarios de Philippe Rabaté publicados en 2009 en el marco del presente seminario, bien conocido es ya el agustinismo estratégico cultivado por Mateo Alemán en su Guzmán de Alfarache. Por mi parte, abordaré hoy el tema bajo el ángulo puramente secular del «buen uso del dinero» que le permite al protagonista-narrador imaginado por el novelista sevillano transmutar el veneno de la concupiscencia (heredado de su padre traficante hispano-genovés) en antídoto o «atriaca» mercantil a la medida de su verdadera vocación. Vivida al revés durante muchos años — al estilo financiero de «los tratantes de Génova» que a la sazón asfixiaban a los mercaderes de Castilla —, la práctica negociante de G