Capítulo XIV. Características distintivas de los edificios de la Plaza Ceremonial de Tamtok
p. 267-286
Résumé
Chapitre XIV Caractères distinctifs des divers édifices de la place cérémonielle de Tamtok - Le mot “cue” (du mot maya k’ul, dieu, chose divine ou idoles) désigne dans la Huasteca toute espèce de monticule artificiel d’origine préhispanique. Ces “cues” attirèrent l’attention des archéologues dès le XIXe siècle. En 1888, Seler pensa que les “cues” de Palachó avaient dû supporter des constructions en matériaux périssables comparables aux huttes des Indiens actuels.
En 1936, Wilfrido Du Solier découvre dans ses fouilles des plates-formes rondes ou rectangulaires souvent munies d’escaliers. Certaines d’entre elles contenaient des tombes. En 1942, Gordon Ekholm fouilla à Las Flores une pyramide tronconique, avec revêtements de sol en stuc et munie d’escaliers. En 1926, John Muir publia le plan du site de Santa-Fé où une place est entourée par une douzaine de monticules. La plupart des sites archéologiques de la Huasteca se présentent ainsi, les monticules formant des unités cohérentes autour d’une place centrale. Le site de Tamtok présentait plusieurs groupes de monticules, dont celui de la Place cérémonielle.
Les 23 plates-formes de cette place cérémonielle étaient construites selon trois plans différents. Le plan le plus ancien était celui des structures rondes qui supportaient de petites maisons d’habitation également rondes, analogues à celles des Huastèques de San Luis Potosí, qui sont faites à l’image du monde. Par exception, AC 3 supportait un temple rond au lieu d’une maison. Beaucoup de plates-formes rondes furent agrandies latéralement et devinrent “en fer à cheval”. Les deux plates-formes centrales AC 1 et AC 2, l’une carrée, l’autre rectangulaire, avaient leur surface supérieure libre, pour l’usage rituel, et avaient une orientation astronomique. Les trois petits “autels” bas, du centre, avaient aussi leur surface supérieure dégagée. Les deux grandes plates-formes rectangulaires allongées, celle du nord et celle du sud, avaient des terrasses libres, pour réunions de caractère social.
Les plates-formes de la Place cérémonielle n’ont pas de fondations, le sol étant ferme. Leur remplissage est fait soit de terre noirâtre, soit d’un matériel pulvérulent blanc ou de couleur claire. Les murs de soutènement, toujours un peu inclinés, ont souvent un profil complexe, dit de “talud y tablero”. La plupart des murs sont en galets et en mortier de chaux, mais quelques murs de luxe, tous récents, sont construits en dalles de grès calcaire. Chaque plate-forme haute avait au moins un escalier. Les escaliers les plus anciens étaient soutenus latéralement par deux murs en galets. Les marches étaient en galets et en dalles. Plusieurs escaliers, récents et luxueux, étaient encadrés par deux larges rampes latérales inclinées. Murs et escaliers étaient recouverts d’une couche de stuc blanc parfois couvert de peintures. Il y avait aussi des revêtements, de sol en stuc, parfois peints. Le mur nord de AC 4 avait une fresque de caractère abstrait.
Une offrande était enterrée rituellement avant chaque surélévation d’une plate-forme. Ces offrandes comprenaient souvent des pointes de projectiles, des vases miniatures, de petites conques marines, etc. La plate-forme centrale AC 1 contenait sept sépultures individuelles. La plate-forme AC 2 avait en annexe une importante sépulture collective. AW 5 qui contenait une offrande sans squelette était peut-être une sépulture par incinération, chose rare dans la Huasteca.
La plupart des morts devaient être enterrés dans des cimetières extérieurs qui n’ont pas pu être localisés.
Texte intégral

1. LOS “CUES” Ο MONTÍCULOS ARQUEOLÓGICOS DE LA HUASTECA
1A pesar de innumerables destrucciones, todavía extisten en la superficie de la Huasteca, varios miles de montículos artificiales de tierra, muchos de los cuales contienen también piedras. Como es natural, la población de la región conoce perfectamente estos montículos, que suelen presentarse formando grupos. Los indios les atribuyen casi siempre un origen casi mitológico. La gente de habla española los designan con el nombre de “cues” (“cuecillos” en diminutivo) y los atribuyen vagamente a los indios idólatras de otros tiempos.
2La palabra “cue”, muy difundida en México en la época colonial, proviene de una palabra maya, k’ul que significa dios, cosa divina ο ídolo. Esta palabra fue mal comprendida por los conquistadores españoles del Yucatán. Ellos pronto la aplicaron, en la forma “cu”, a los lugares de culto indígenas, que solían estar constituidos por una plataforma más ο menos piramidal, sobre la cual había un templo ο un altar. Pero, posteriormente, esta interpretación religiosa fue desapareciendo y, en la Huasteca, la palabra “cue” vino a designar cualquier clase de montículo artificial de origen prehispánico.
3En el siglo XIX, los “cues” de la Huasteca llamaron la atención de los arqueólogos y de los aficionados de antigüedades. La forma y las dimensiones de estos cues eran muy variadas. La mayoría de ellos parecían simples montones de tierra, pero otros mostraban restos de muros de contención hechos de piedras y revestimientos de piso de estuco. Era tentador interpretarlos como túmulos funerarios, pues los saqueadores a veces encontraban en ellos entierros. Pero en 1873, un dibujo de Alejandro Prieto (1873, p. 12 bis) mostró uno de esos montículos, muy bien conservado, que tenía la forma de un cono truncado, con muros de contención y escaleras laterales de piedra. Aun cuando su superficie superior no mostraba vestigios de muros de piedra, era probable que un edificio así hubiera sido el basamento de un pequeño edificio, ya fuera un templo ο un palacio. En 1888, Eduard Seler, después de estudiar superficialmente los cues de Palachó, llegó a la judiciosa conclusión de que soportaron construcciones hechas de materiales perecederos, las cuales, por abandono ο incendio, habían desaparecido sin dejar huella, tal como desaparecen en nuestros días las chozas actuales de los indios de la región (Seler 1960-1967, t. II, p. 173).
4Así se llegó a pensar que, desde los tiempos prehispánicos muy antiguos, los huastecos habían adoptado la costumbre de construir algunas de sus chozas sobre pequeñas plataformas que ofrecían la doble ventaja de hacerlas resaltar y de aislarlas un poco de la humedad del suelo. Pero, dado que la construcción de un montículo de tierra con herramientas primitivas representaba un trabajo importante, era lógico que estas casas construidas sobre plataformas fueran privilegio de los jefes, de los nobles ο de los dioses. Partiendo de ahí, se llegó a la idea de que los cues más altos de la Huasteca, se podían comparar con las pirámides aztecas y mayas, aun cuando otros más pequeños fueran quizá hechos para recibir entierros.
5Correspondía a los arqueólogos del siglo XX establecer lo que pudieran tener de cierto estas diferentes hipótesis. A partir de 1936, Wilfrido Du Solier comenzó a excavar algunos “cues” de la Huasteca. Descubrió plataformas redondas y rectangulares que solían estar provistas de escaleras. Algunas de ellas, en el sur, contenían verdaderas tumbas de mampostería.
6Gordon Ekholm, realizó en 1942 la primera excavación precisa y detallada de un antiguo montículo de la Huasteca en un lugar llamado Las Flores, situado en los suburbios de la parte noroeste de la ciudad de Tampico. El edificio en cuestión era una pirámide troncocónica, bastante ancha, construida con tierra pero revestida de estuco y provista de escaleras modeladas con este mismo material. Sus dibujos de planos y de cortes, publicados en 1945, mostraron más de 26 superposiciones, cada una de ellas marcada por un revestimiento de piso de estuco. El material recopilado fue bastante pobre, pero la excavación de entierros inmediatamente vecinos permitió datar el sitio en el periodo postclásico temprano.
7Los antiguos montículos ο “cues” de la Huasteca rara vez se presentan aislados. Casi siempre están agrupados y forman un sitio arqueológico. Algunos de estos sitios son muy grandes y reúnen varias decenas de montículos, distribuidos irregularmente. Su estudio completo exigiría mucho trabajo. Pero otros más pequeños, con frecuencia agrupados alrededor de una plaza central, parecen formar unidades coherentes que ameritan ser estudiadas con detalle. Desde 1926, John Muir publico el plano de las curvas de nivel del sitio de Santa Fe, donde existe una plaza de alrededor de 40 x 80 m, al parecer rodeada por una docena de “túmulos” (“mounds”).

El sitio huasteco de Tamposoque, M° Cd Valles, SLR según W. Du Solier, 1945, p. 124, lam. II
Le site huastèque de Tamposoque, M° Cd Valles, SLP, d’après W. Du Solier, 1945, p. 124, planche II

Sitio arqueológico de Santa Fe, según John Muir, 1926, p.232, Fig.I
Le site archéologique de Santa-Fé d’après John Muir, 1926, p. 232, Fig. I
8Las primeras excavaciones de sitios arqueológicos de la Huasteca fueron realizadas por W. Du Solier. El pequeño sitio de Tamposoque, restaurado por él en 1940, reveló un plano notoriamente simétrico (Du Solier, 1945, p. 124). Si la excavación del sitio de Consuelo, en 1946-1947, se hubiera publicado de manera completa con el estudio del material recopilado, habría dado la imagen de un sitio importante de la época postclásica temprana. Fue, pues, la excavación de la Plaza Ceremonial de Tamtok lo que permitió el primer estudio de un grupo coherente de 23 montículos huastecos de formas y dimensiones diversas. A continuación ofreceremos un cuadro de conjunto de este grupo, empezando por un estudio de la arquitectura y del material, para terminar en una clasificación cronológica y un ensayo de interpretación.
2. LAS DIVERSAS CLASES DE PLATAFORMAS DE LA PLAZA CEREMONIAL DE TAMTOK
a) PLATAFORMAS MÁS Ο MENOS CUADRADAS, DE SUPERFICIE SUPERIOR DESPEJADA, DE USO RITUAL
9Seis de las estructuras de la Plaza Ceremonial tenían una superficie superior libre, sobre la cual no se levantaba ninguna casa ο construcción de ese tipo. Todas ellas eran de planta cuadrada, ο casi cuadrada. Se trataba de pequeñas terrazas de uso ritual.
10Así eran en especial, las tres pequeñas plataformas muy bajas a las que hemos llamado “altares”, cuyo carácter ritual es bastante evidente. Incluso esto ha quedado demostrado en el caso de AC 4, en virtud de las cinco estatuillas que se encontraron en ella, y en el de AC 5, por la pequeña estela que la remataba. Por otra parte, la pequeña banqueta situada contra la escalera de AC 3, era también un altar, puesto que sostenía una pequeña estatua cuyo lugar de inserción todavía se puede ver.
11La plataforma AC 1, con sus dos escaleras opuestas, tenía una superficie superior plana y estucada, de casi 55 m2, que muy probablemente se usaba para ritos ο danzas ejecutadas por un grupo bastante numeroso. Su posición central y las tumbas que guardaba le daban un carácter sagrado. La plataforma AC 2, apenas un poco más larga que ancha, sin duda tenia también un valor religioso, pues es probable que haya estado rematada por una estela y tenía, adjunta, un importante entierro colectivo. Por último, AW 5, era un simple túmulo funerario que contenía un rico entierro por incineración. En cuanto al terreno del juego de pelota AS 5, éste no era una terraza, sino una especie de corredor empleado para un juego de carácter ritual y social.


b) PLATAFORMAS REDONDAS Ο EN PLANO DE HERRADURA
12La gran mayoría de las plataformas de la Plaza Ceremonial (14 ó 15 de 23) estaban destinadas a la habitación, pues cada una de ellas soportaba una pequeña casa redonda, que tenía su fogón doméstico para cocinar. En un principio, todas estas plataformas fueron redondas, pero posteriormente se les dio a casi todas una planta absidal en herradura.
13El caso de la enorme estructura AC 3 es más difícil de interpretar. Es probable que antes del derrumbe de su parte superior, esta plataforma soportara una pequeña pero importante construcción redonda; pero ésta probablemente fue un templo ο la casa sagrada de un cacique del pueblo. En efecto, la situación central de AC 3, sus grandes dimensiones y el lujo con que fue construida, la distinguen de las plataformas para uso de habitación de las cuales acabamos de hablar.
c) PLATAFORMAS RECTANGULARES CON TERRAZAS, DE USO PROBABLEMENTE SOCIAL
14Las dos plataformas rectangulares, AN 2 y AS 1, parecen haber sido, por lo menos en un principio, grandes terrazas donde se podían llevar a cabo reuniones bastante numerosas de carácter más bien social que ritual. AN 2 en un principio fue una terraza de unos 5.40 m de altura y 115 m2 de superficie. Posteriormente fue construida en su parte central, una pequeña terraza superior absidal que soportaba una pequeña casa redonda, con su fogón. AS 1 fue en un principio una terraza rectangular dotada de una pequeña casa rectangular con fogón, cerca de su extremo oriental. Posteriormente, esta terraza, ampliada y alzada, soportó una casa rectangular tan grande que podía reunir a un número importante de personas.

3. REALZAMIENTO Y AMPLIACIÓN DE LAS PLATAFORMAS
15Las modestas plataformas de Tamtok pueden considerarse como equivalentes arcaizantes de las nobles “pirámides” que son un elemento esencial de la antigua arquitectura mesoamericana. Ahora bien, sabemos que las pirámides de Teotihuacán, de Tenayuca, de Chichén Itzá y de otras partes, se ampliaban ocasionalmente, ο en forma periódica, en superficie y en altura. Los edificios de la Plaza Ceremonial permiten seguir la realización de este mismo proceso arquitectónico. Veremos que se puede dar un alzamiento sin ampliación, pero que en principio, ampliación implicaba realzamiento. Algunas plataformas de la Plaza Ceremonial no fueron objeto de ampliación ο superposición. Estas son AN 1 (montículo del Falo de Piedra) y los tres pequeños “altares” AC 4, AC 5 y AW 3 sin hablar del montículo funerario AW 5.
a) REALZAMIENTO SIMPLE
16Algunas plataformas redondas de Tamtok han sido realzadas sin ser ampliadas. Tal fue el caso de AW 1 (montículo del Noroeste), de AW 2 (La Torre), de AS 3 (Montículo Excéntrico) y de AE 1 (montículo del Armadillo), cuyo diámetro medio es de 11.50 m. La plataforma cuadrada AC 1 fue tratada de la misma manera. Esta operación se realizaba por simple elevación del muro de contención y por la adición simultánea de una capa suplementaria de material de relleno, rematada por un nuevo revestimiento de piso de estuco.
b) AMPLIACIÓN Y REALZAMIENTO SIN CAMBIO DEL PLANO GENERAL
17La gran plataforma rectangular AS 1 (montículo de la Laguna), fue ampliada lateralmente y realzada verticalmente sin cambiar mucho su planta general. El gran Montículo Corcovado, AN 2, de planta vagamente rectangular, en un principio elevado hasta 5.40 m, sufrió después otra superposición que lo elevó 2 m mediante la adición de una pequeña plataforma absidal, en forma de herradura, en la parte central de su larga terraza superior. La plataforma rectangular AC 2 (montículo de la Estela) de medianas dimensiones, fue ligeramente ampliada y realzada sin que por ello cambiara su aspecto.
c) AMPLIACIÓN CON CAMBIO DE PLANTA CIRCULAR A PLANTA EN HERRADURA
18Cinco ο seis plataformas que en un principio eran redondas, fueron ampliadas lateralmente para cambiar a una planta “absidal” ο en “forma de herradura”. Estas son: el montículo AW 4 (montículo del Cerón), AW 6 (montículo de las Tortugas), AW 7 (montículo de la Primera Estatua), AS 2 (montículo de las Piedras), AS 4 (montículo del Sureste) y AE 2 (montículo en forma de Herradura). Este tipo de ampliación lateral le daba a la estructura una planta alargada, con una fachada rectilínea y una escalera del lado que miraba al centra de la plaza. Las dimensiones horizontales promedio de este tipo eran de 12 x 16 m.
19Al parecer, después de esta serie de ampliaciones, el plano absidal se volvió bastante habitual y las plataformas AE 3 (Montículo Oblicuo) y AE 4 (montículo del Noreste) quizá hayan sido directamente construidas en forma de herradura, sin pasar por una fase de planta circular. Sin embargo, conviene tener algunas reservas respecto a AW 6 y a AE 4, pues hubiera sido necesario excavarlas en forma más completa en sus partes profundas. La existencia de una primera plataforma redonda en AW 6 es una pura hipótesis, pues debió de ser tan baja que la excavación no logró descubrirla. La plataforma AE 4 parece haber tenido una planta absidal desde su primera fase de construcción, al igual que AE 3, pero esto no se ha podido demostrar plenamente.
d) ANEXOS DE ALGUNAS PLATAFORMAS
20Tres de las plataformas de la Plaza Ceremonial tienen altares contiguos, cerca de su escalera. El de AW 6 (montículo de las Tortugas) es muy bajo y está a la derecha de la escalera. El del gran Montículo Corcovado, AN 2, está situado entre dos escaleras y mide un metro de alto. El de AC 3 (Montículo Redondo) tiene más de 40 cm de alto y se encuentra a la izquierda de la escalera. Es el único que tiene la cara superior estucada. En la parte central de su revestimiento de estuco presenta una abertura alargada, de extremos redondeados, que sin duda estaba hecha para recibir la base de una estatua de piedra.
21La estructura AC 3 (Montículo Redondo) tenía una especie de acera estucada, de 3.50 m de largo, 1 m de ancho y 25 cm de altura, que conducía al centra del primer peldaño de la escalera. Delante de la escalera de AE 3 (Montículo Oblicuo) se extendía una superficie de piso estucado de 1.50 m de radio.
4. ORIENTACIÓN DE LAS PLATAFORMAS DE LA PLAZA CEREMONIAL
22La orientación de las dos principales plataformas centrales de la Plaza Ceremonial, AC 1. (montículo de las Dos Escaleras) y AC 2 (montículo de la Estela) parecen corresponder a preocupaciones astronómicas ο cosmográficas. En efecto, sus ejes medios están orientados casi este-este-sureste, pero con una desviación de alrededor de 16° hacia el sur con relación al este astronómico, lo que es más ο menos la orientación de Tenayuca y de la pirámide del sol de Teotihuacán. Esto confirma la impresión de que estas dos plataformas tenían una importancia fundamental en Tamtok, lo cual no quiere decir que hayan sido empleadas para la observación de los astros.
23La orientación de los edificios del perímetro de la plaza esta dada por sus fachadas ο por sus escaleras. Estas fachadas y estas escaleras siempre miran hacia la plaza ο hacia su centro, pero con marcadas variantes. Así, las estructuras del oeste, que son probablemente las más antiguas, están todas orientadas hacia el levante en lugar de hacia el centro de la plaza, centro que quizá todavía no se materializaba. Asimismo, la enorme y alta plataforma del norte, AN 2, mira sencillamente hacia el sur. Por lo contrario, las estructuras del sur y del este están casi todas mirando más ο menos hacia el centro de la plaza.
24Es probable que en un principio no existiera todavía la plaza, sino simplemente algunas plataformas alineadas al pie del cerro de Piedras Paradas. Con la construcción posterior de las estructuras del sur y del este, la plaza empezó realmente a existir y a tener un centro que finalmente fue ocupado por el montículo de las Dos Escaleras, AC 1. Pero a veces existe alguna diferencia entre la orientación final de una plataforma y la que tenía su plataforma interior más antigua. Así, el eje de AE 1 en un principio miraba un poco más al noroeste y los de AE 2, AE 3 y AE 4 un poco más al sur. Cabe la posibilidad de que la construcción final de AC 1 haya llevado a desplazar un poco el centro ceremonial de la plaza.
5. LOS PEQUEÑOS EDIFICIOS LIGEROS CONSTRUIDOS SOBRE LAS PLATAFORMAS
25Pudimos determinar las plantas de las diversas casas de la Plaza Ceremonial por los vestigios de sus revestimientos de piso que fueron enterrados a medida que se realizaron los alzamientos de las plataformas. Estos revestimientos estaban formados por una capa de estuco, de 1 a 3.5 cm de espesor, cuya superficie superior, cuidadosamente alisada era generalmente blanca ο de color amarillo oscuro ο incluso beige y que a veces presentaba una decoración pintada, muy sencilla, no figurativa y casi siempre en negro.
a) CASAS REDONDAS
26Los pequeños edificios ligeros construidos sobre las plataformas eran generalmente casas redondas que debieron de tener un techo cónico. Los Huastecos más tradicionales del estado de San Luis Potosí todavía construyen sus casas de este modo. A su manera de ver, la casa redonda es la morada ritual por excelencia y la imagen del mundo. Excepcionalmente, la estructura rectangular AS 1 sostuvo en épocas sucesivas, casas rectangulares. En Tamtok no se ve que hayan existido casas “biabsidales” de planta alargada, con dos extremos redondeados, comparables a las que son tan comunes actualmente en la Huasteca Veracruzana.
b) CADA CASA-HABITACIÓN TENÍA SU FOGÓN
27En el caso de las casas redondas, nunca se encontraron vestigios de la existencia de un poste central, lo cual demuestra que la armadura cónica del techo se sostenía por sí misma, como en el caso de las actuales casas redondas huastecas. Probablemente cada una de esas casas redondas tenía un fogón, pero los vestigios de éste a veces escaparon a nuestra observación cuando hicimos las excacavaciones. Podían también hacer fuego entre tres piedras, sobre la superficie plana del estuco (en el caso de AE 2), lo que dejó manchas de combustión. En otras ocasiones, el fuego se prendía sobre una superficie plana no estucada la cual, en el caso de AW 4, está rodeada por una franja negra, pintada sobre el reborde del estuco. En casi la mitad de los casos, el fogón se presentaba como una depresión, cuyas paredes y el fondo estaban cuidadosamente estucados. Esta depresión solía tener entre 50 y 70 cm de diámetro y de 10 a 15 cm de profundidad. Por regla general, las encontramos llenas de cenizas de carbón y de diversos vestigios. Una de estas concavidades (en AE 3) probablemente acabó por parecerles inútil pues fue rellenada con tierra y su superficie se estucó al nivel del revestimiento de piso que la rodeaba. El fogón solía estar cerca del centra de la casa; casi nunca en el centra mismo, como lo hacen los huastecos actuales. Las casas redondas provistas de un fogón, evidentemente se empleaban como habitación, puesto que ahí se podía cocinar. Sin embargo, la casa rectangular de la segunda fase de construcción de AS 1 (montículo de la Laguna) tenía un fogón en forma de depresión semicircular no estucada.

AW 2 Fogones superpuestos
Foyers superposés
c) MUROS DE LAS CASAS
28Tuvimos conocimiento de los muros de los edificios ligeros construidos sobre las plataformas por las huellas que dejaron en el piso cuando los destruían, lo que sucedía en cada alzamiento. Estos vestigios forman una franja de tierra amarillenta, generalmente poco profunda (ca. 6 cm) y de una anchura que solía variar entre 15 y 20 cm. Era evidente que el muro estaba hecho de “bajareque”, sostenido por una armadura de madera, cuyas huellas por lo común son poco visibles. En la base de un muro de AW 2 (La Torre), se pudieron observar restos de postes, separados entre sí unos 30 ó 40 cm, con un diámetro que variaba entre 7 y 15 cm. En una casa de unos 6 m de diámetro, había alrededor de 40 postes. En la casa más antigua encontrada en AW 7 (montículo de la Primera Estatua), los postes habían dejado huellas muy visibles, de unos 15 cm de diámetro, separadas de 20 a 40 cm entre sí. Aunque no pudimos despejar todo el perímetro de esta casa de 9.60 m de diámetro, estimamos que en la construcción de sus muros por lo menos se utilizaron 100 postes.

AW 2
Pared de bajareque
Cloison en torchis
d) PUERTA Y UMBRAL DE CADA CASA
29En cada una de estas casas, del lado de la plaza, las huellas de los muros se interrumpían en unos 80 cm, que correspondían a la anchura de una puerta. Pero en este espacio que quedaba libre, el revestimiento de piso del interior de la casa se prolongaba hacia el exterior formando un umbral, generalmente bastante grueso, que a veces se ensanchaba lateralmente y que ocasionalmente se completaba con una especie de umbral anterior (AW 7).
30La gran casa rectangular de la última fase de AS 1 (montículo de la Laguna) tenía un umbral excepcional de 1 m de ancho, lo que quizá correspondía a las necesidades de un lugar de ceremonias.


e) PISOS DE LAS PLATAFORMAS: ESTUCADOS Ο ENDURECIDOS CON FUEGO
31Además de su revestimiento de piso interior, algunas casas tenían también en el exterior, otro revestimiento de piso de estuco. Tanto en el uno como en el otro, el estuco se elevaba ligeramente al contacto de la base de los muros, y a veces estaban decorados con pinturas muy sencillas, no figurativas, casi siempre de color negro. En AS 4, esta decoración se presentaba tanto en la parte exterior como en la interior. Alrededor de la casa de AW 2, todo el estuco exterior estaba pintado de negro. En AW 4, el estuco exterior estaba decorado con anchas fajas negras que parecían radiar del centra. Por último, en el caso de AE 4, adelante de la puerta, el estuco exterior del umbral anterior estaba dividido en dos mitades, una negra y la otra amarilla, separadas por una estrecha franja roja y blanca. Este fue el único caso de policromía que descubrimos.
32Los revestimientos de piso de estuco, hechos con mortero de cal, son muy comunes en Tamtok, al igual que en casi todos los sitios arqueológicos del Postclásico Reciente de la Huasteca. Ya se empleaban en el Postclásico Temprano (Pánuco V) del sitio de Las Flores, cerca de Tampico; ahí el mortero de cal se obtenía fácilmente quemando conchas de ostras. Pero en los periodos más tempranos, al parecer no se hacía así, pues generalmente se encuentran pisos de arcilla alisada y quemada e incluso pisos revestidos con chapopote (bituma). (Ekholm 1944, fig. 3, p. 336; Muir, 1926, p. 333).
33En Tamtok, pisos de superficie de arcilla alisada y quemada, se encontraron solamente en los niveles más bajos de AS 1 (montículo de la Laguna), pero en este caso, para recubrir no el piso interior de las casas, sino la superficie de las grandes terrazas exteriores. En el corte estratigráfico de Pánuco realizado por Ekholm (1944, p. 386), aparecen estos suelos quemados desde el Preclásico Tardío (Pánuco III) hasta el Postclásico Temprano (Pánuco V). Son los únicos que se encuentran presentes en el sitio de Ébano, de la época clásica tardía, y por supuesto, en el sitio clásico temprano de San Antonio Nogalar.
f) HUELLAS DE INCENDIOS
34Las casas construidas con estos materiales perecederos eran fácil presa del fuego. La Plaza Ceremonial conservaba las huellas de tres incendios, dos de ellos en la estructura AS 1 y uno en la estructura AE 3. El incendio de la tercera casa de AS 1 nos proporcionó algunos datos interesantes, porque esta casa, que era rectangular, se ladeó hacia el norte y sus restos fueron cubiertos poco después por la tierra de una nueva superposición. La arcilla del bajareque había sido cocida por el fuego. Conservaba las huellas de tallos de gramíneas, trozos de caña, grandes bambúes (Guadua sp.) y pilares de madera. El muro, que tenía menos de 2 m de altura, había sido blanqueado a la cal en sus dos superficies. No aparecieron huellas de las hojas en abanico de las palmeras del género Sabal, lo cual demuestra que el techo debió de haber estado hecho de rastrojo de la gramíniea cultivada que hoy en día llamamos “zacate de casa” ο ata torn (Imperata brasiliensis Trin). La combustión de este techo produjo una ceniza blanca, en la que se encontraron los restos de un nido de avispas hecho de arcilla.

Restos de nidos arcillosos de avispas que escaparon al incendio de un techo de zacate de una casa de AS 1 (dibujo de Guy Stresser-Péan)
Restes de nids de guêpes en argile ayant échappé à l’incendie du toit en chaume d’une maison de AS 1 (dessin de Guy Stresser-Péan)
g) EL TEMPLO REDONDO, DESAPARECIDO DE LA PLATAFORMA AC 3
35No queda ninguna huella del edificio ligero que, sin duda, remataba antiguamente la plataforma AC 3, la más bella y más lujosa de toda la Plaza Ceremonial. Es muy probable que fuera un templo, que debía de ser redondo con un techo cónico bastante elevado. Esta forma circular no deja de evocar el culto del dios del viento, que los aztecas llamaban Quetzalcóatl Ehecatl y que ellos colocaban también entre los creadores del universo. Se puede pensar que, a los ojos de los antiguos huastecos de Tamtok, el templo redondo de AC 3 era una imagen del mundo.
6. EL SUELO NATURAL DE LA PLAZA CEREMONIAL DE TAMTOK
36El plano levantado en 1964 por la Compañía Aerofoto muestra que el sitio de Tamtok se encontraba en una llanura modelada por la erosión fluvial y dominada por diversos relieves residuales. El suelo de la Plaza Ceremonial formaba una especie de rectángulo alargado norte-sur, de alrededor de 120 x 170 m. Esta superficie de unas 2 hectáreas estaba dominada al oeste por la loma de Piedras Paradas, tenía una altura de 13 a 14 m y estaba limitada al nor-noroeste por la loma del Montículo Corcovado (AN 2), que en un principio debió de tener de 5 a 6 m de altura. Del lado sur, esta superficie plana estaba separada de la laguna de la Ceiba por un leve relieve de menos de un metro de alto, en el cual se talló el pequeño corredor del juego de pelota. La Plaza Ceremonial fue, pues, edificada sobre un terreno casi horizontal, con una ligera pendiente hacia el este-noreste, pero que se elevaba un poco al sur y mucho más en sus límites oeste y noroeste. En su parte central, el suelo estaba formado por una capa de 30 a 35 cm de tierra dura, negruzca, arcillosa y humífera que se encontraba sobre un subsuelo todavía más dura formado por grava y conglomerados de piedras de río.
37Del lado oeste, la hilera de estructuras de AW 1 a AW 7 ocupaba parcialmente la vertiente oriental del cerro de Piedras Paradas y por tanto tenía un suelo de tierra pulverulenta amarillenta análoga a la de este cerro. Más al este, este suelo blando y amarillento se encuentra todavía presente bajo el altar AW 3, pero ya bajo AC 5 (altar de la Estela) y bajo la fachada de la estructura AW 6 (montículo de las Tortugas) esta remplazado por un subsuelo de arcilla negra y grava. Cabe destacar que la loma de Piedras Paradas que domina la plaza desde sus 13 ό 14 m de altura, tiene una vertiente este cuya pendiente actual es de unos 65°. En un terreno tan blando, no es posible que una pendiente tan marcada sea natural. Lo más probable es que antiguamente fuera menos inclinada y que posteriormente haya sido sometida a alguna corrección.
38Al nor-noroeste de la plaza, es muy posible que se haya utilizado una loma natural, alargada de este a oeste, para formar una buena parte de la gran estructura AN 2 (Montículo Corcovado). Esta modesta elevación natural parece haber estado constituida por una tierra blancuzca ο amarillenta extremadamente friable, que recuerda la que forma el cerro de Piedras Paradas. Es probable que tuviera una vertiente sur de pendiente suave pero que ésta haya sido cortada y remplazada por la fachada de mampostería de la estructura AN 2, con sus tres escaleras. Es probable que delante de esta fachada el terreno de la plaza haya sido nivelado en parte, salvo entre dos de las escaleras que es donde está colocado el altar.
7. MATERIALES DE RELLENO DE LAS PLATAFORMAS
39Joaquín Meade (1948, pp. 24, 25) sugirió que la tierra de relleno de las plataformas ο de los montículos artificiales de Tamtok pudo ser extraída de las depresiones ο “lagunas” cercanas, en especial de la laguna de los Patos, situada a 200 m al norte de la Plaza Ceremonial. Pero ya dijimos que esta depresión estrecha y sinuosa había sido formada, sin duda, por el paso de un brazo del río. Sin embargo cabe la posibilidad de que la laguna de la Ceiba, situada justo al sur de la Plaza Ceremonial, haya proporcionado tierra húmeda y blanda fácil de extraer. El propio suelo de la plaza, arcilloso, duro y poco profundo hubiera sido difícil de explotar de manera sistemática.
40La excavación de la Plaza Ceremonial nos mostró el empleo de dos clases de materiales blandos de relleno. Uno es una tierra vegetal, arcillosa, humífera y negruzca frecuentemente con tiestos de la época postclásica tardía. Esta tierra negra debió de ser recogida de un suelo superficial, con frecuencia en un sector de habitación. El otro material blando de relleno es de diversos colores: blanco, grisáceo ο amarillento. Su consistencia es cenagosa, pulverulenta, a veces casi cenizosa. Este material muy blando, desprovisto de tiestos, al parecer fue tornado de diversas capas geológicas naturales, probablemente en la loma de Piedras Paradas ο en la “Plataforma Oriental” que colinda con Piedras Paradas y el Gran Corredor.
41Estos materiales de relleno casi siempre fueron colocados cuidadosamente, formando estratos horizontales superpuestos, de diversos espesores, a veces separadas por capas delgadas de estuco, cuya superficie superior se alisaba ο se pulía. Después de la aportación de una nueva capa de relleno con la superficie bien nivelada, se la podía recubrir con un revestimiento de piso de estuco, que formaba lo que prácticamente equivaldría a un enlosado moderno ο un mosaico romano. Aparte de los dos pequeños altares bajos, AC 4 y AW 3, que están rellenos con tierra negra, tan sólo existen dos estructuras con un relleno casi homogéneo; éstas son AC 1 (montículo de las dos Escaleras) y quizá AS 2 (montículo de las Piedras), ambos rellenos de materiales suaves de color claro. Las otras 18 estructuras tienen un relleno complejo, con una alternación, a veces regular y a veces no, de capas negruzcas y capas claras. En la gran mayoría de los casos, casi todas las capas profundas eran blandas y de color claro, aun cuando la capa más alta era casi siempre negra. Es preciso tratar aparte el caso del gran Montículo Redondo, AC 3, que no presenta capas horizontales superpuestas. El relleno de esta estructura fue hecho con diversos materiales, aparentemente vertidos desde un punto central a partir del cual se deslizaba en capas de diversas inclinaciones.
8. MATERIALES DE CONSTRUCCIÓN DE LOS MUROS DE CONTENCIÓN
a) GUIJARROS
42El suelo natural del meandro de Tamtok, formado principalmente por depósitos fluviales, proporciona una abundante cantidad de guijarros que en su mayoría son de caliza de la época cretácea y que se pueden también recoger en determinados puntos del lecho del río. A pesar de que su forma redondeada es algo incómoda, estos guijarros forman casi 80% de los muros de contención de la Plaza Ceremonial. También son el material esencial en el sitio cercano de Consuelo. Cabe destacar aquí, por comparación, que la antigua capital totonaca Cempoala (cerca de Veracruz) fue edificada en una llanura aluvial desprovista de afloramientos rocosos y que, por eso, sus edificios están construidos casi enteramente con guijarros.
b) LAJAS DE ARENISCA CALIZA
43Los antiguos habitantes de Tamtok sabían que en otros poblados vecinos, en especial en las colinas de Cuayalab y del cerro de Agua Nueva, se construían sólidos muros de hermosa apariencia con lajas de arenisca caliza. Esta arenisca caliza que se desgasta en forma natural en lajas más ο menos gruesas, proviene generalmente de las capas eocenas llamadas de Chicontepec ο de Tanlajas, pero también pueden provenir de niveles geológicos más recientes. En ausencia de afloramientos locales de arenisca, durante largo tiempo, los habitantes de Tamtok prescindieron de este material de lujo ο lο emplearon con mucho comedimiento. Sin embargo, acabaron por traer de fuera, quizá en canoas, cantidades bastante importantes de tales lajas para construir totalmente cuatro estructuras (AC 1, AC 2, AC 3 y AE 1), parte de otras tres y para incorporar estas lajas ornamentales en ciertos muros de guijarros, como es el caso del muro norte de AE 4. La anterioridad con que emplearon los guijarros aparece claramente en las fases de construcción de las estructuras AC 2, AS 3 y AS 4. Pero incluso cuando construían fundamentalmente con guijarros, era necesario el empleo parcial de lajas de arenisca para formar los peldaños de las escaleras y para contener la parte superior vertical de los muros de perfil complejo llamado de “talud y tablero”.
c) BLOQUES DE PUDINGA
44Los geólogos franceses llaman “pudinga” a los conglomerados compuestos por elementos redondeados que en la Huasteca Potosina se les conoce con el nombre de “piedra china”. De estos, existe un yacimiento en el lugar llamado “Piedras Chinas”, situado a menos de 2 km río arriba de Tamtok. Este material es apreciado por su dureza y porque, por regla general, se presenta en bloques bastante gruesos de 15 a 20 cm de diámetro. Su empleo se limitó a la construcción de una simple hilada como basamento de los muros de guijarros de AW 2, AW 7 y de la cara norte de AE 2. Los bloques de pudinga que recubren la importante tumba de AW 5 probablemente se eligieron por su aspecto particular que debía llamar la atención. Recordemos, de paso, que entre los escombros de la pequeña estructura, probablemente ritual ο funeraria, que fue destruida por un saqueo en la cima de la “pirámide” del oeste, llamada del Tizate, se encontraron bloques de este mismo conglomerado.
d) FRAGMENTOS DE METATES
45A veces, para la construcción de algunos muros, se empleaban fragmentos de metates de basalto en lugar de las lajas de arenisca.
e) MORTERO DE CAL (O ESTUCO)
46La construcción de la Plaza Ceremonial de Tamtok requirió de una gran cantidad de mortero de cal. Nosotros no descubrimos hornos de cal, pero el hallazgo de trozos de escoria nos indicaba que se producía cal en Tamtok. Esta escoria está formada principalmente por una matriz vitrosa fundida a más de 1 350° en la que los elementos dominantes son el silicio y el calcio. La ausencia de cobre no nos permite pensar en un desecho de metalurgia (análisis realizado en 1987 en el Centro de Aplicaciones y de Investigaciones en Microscopia Electrónica). Por lo tanto, cabe suponer un posible recalentamiento de estos hornos de cal cuya temperatura normal no pasa de los 1 000°. No podemos, pues, saber con seguridad si toda la cal se produjo en el lugar (mediante la combustión de piedra caliza) ο si se fabricó diez kilómetros más al oeste, con la caliza cretácea de la sierra de Tanchipa.
47El mortero de cal se utilizaba ante todo para detener los elementos de forma redondeada que formaban los muros de guijarros. Pero a todos los muros se les daba un acabado que consistía en un revestimiento exterior con una capa vertical de mortero de cal cuidadosamente alisada ο pulida. Recordemos, que la superficie superior de las plataformas también era tratada con un revestimiento de piso hecho con este mismo mortero de cal que nosotros llamamos convencionalmente “estuco”.
9. MODOS DE CONSTRUCCIÓN DE LOS MUROS DE CONTENCIÓN
48Salvo quizá en la cercanía inmediata de la loma de Piedras Paradas, los constructores de la Plaza Ceremonial gozaron de la ventaja de contar con un terreno natural muy firme y no tuvieron que socavar para hacer los cimientos de sus muros.
49Como ya hemos dicho, la mayoría de los muros de contención de Tamtok fueron construidos con una sola capa de guijarros, simplemente apilados, unos sobre otros, pero mezclados con mortero de cal ο “estuco” que los mantenía unidos y cuya superficie exterior se alisaba. Se obtenía así un muro de muy poco espesor, cuya estabilidad tan sólo se aseguraba por el sostén de la tierra (más ο menos blanda) del relleno interior y por la solidez (más ο menos temporal) del estuco. La base de algunos de estos muros estaba a veces formada por una hilera de bloques de pudinga. Pero en una época probablemente tardía, se empezaron a construir en Tamtok muros más estables, de lajas de arenisca calcárea, cuyo espesor variaba, en general, entre los 8 y los 15 cm. Estas lajas estaban dispuestas en hiladas horizontales regulares superpuestas sin intercalación de mortero. Su borde externo estaba un poco biselado, según la inclinación del muro. En las plataformas rectangulares, los ángulos de los muros estaban cuidadosamente redondeados.
a) MUROS SOLAMENTE INCLINADOS Y MUROS DE PERFILES COMPLEJOS
50Los muros de contención, sobre todo cuando están construidos con guijarros, no pueden mantenerse si no se les da una ligera inclinación hacia el interior, con el fin de que se apoyen sobre el relleno interno de tierra. Cuando estos muros son de poca altura, como los de los “altares” AC 4, AC 5, AW 3 y el de la plataforma baja de AN 1, pueden ser prácticamente verticales; pero cuando son más altos su inclinación media suele aproximarse a los 80°. Excepcionalmente, la estructura AN 2 (Montículo Corcovado) tenía muros de guijarros de 5 ó 6 m de altura, cuya inclinación se acercaba a los 60°. Sin embargo, estas diversas inclinaciones observadas actualmente pueden ser mentirosas, pues seguramente han aumentado después de siglos de abandono, por hundimiento de la tierra del relleno interior.
51A excepción de las estructuras más bajas (altares) ο de las más altas (AN 2), amén de las del terreno del juego de pelota, casi todos los muros de contención de la Plaza Ceremonial parecen haber tenido un perfil transversal complejo, que generalmente era del tipo en “talud y tablera”. La estructura AC 3 (Montículo Redondo) es un caso único de perfil en “gradas”.
b) MUROS DE PERFIL COMPLEJO EN “TALUD Y TABLERO”
52Este tipo de perfil está formado por una parte baja inclinada hacia el interior, superpuesta por un ligero saliente horizontal y por una parte alta vertical. En el centra de México, este perfil es característico de los edificios de la época clásica de Teotihuacán y se le ha dado el nombre de “talud y tablero”. En la Huasteca Potosina, se empleó mucho en la época postclásica, pero debido a la fragilidad de su parte superior, rara vez se ha conservado completó, excepta en Tantzan. En Tamtok, encontramos un ejemplar casi intacto en el interior de la estructura AC 2 (montículo de la Estela) que se pudo conservar pues quedó protegido. Su altura total era de casi 1.35 m. Sus muros son de guijarros, con una parte superior detenida por la saliente de una serie de lajas horizontales de arenisca calcárea. La parte inferior, de 70 cm de altura, tiene una inclinación de unos 70°. La parte superior vertical debió de tener 60 ô 65 cm de altura. En casi todas las demás plataformas, la antigua existencia de la parte superior vertical tan sólo queda atestiguada por la saliente de algunas lajas horizontales.


c) MURO DE PERFIL COMPLEJO EN GRADAS
53Este tipo excepcional de perfil sólo lo hemos encontrado en Tamtok en los muros de lajas del gran montículo Redondo AC 3. Su parte inferior, con una inclinación de 70° y 95 cm de altura, termina en un rellano de superficie horizontal, de 35 cm de anchura. A este nivel empieza otro muro de contención, inclinado como el anterior, pero retirado 35 cm en relación con éste. Este segundo muro, que carecía de una base sólida sólo se conservé hasta los 65 cm de altura. Calculamos que cuando la estructura AC 3 estaba intacta, tenía cinco pisos en gradas y que alcanzaba una altura total de unos 4.75 ó 5 metros.
d) ESCALERAS
54Cada una de las plataformas tenia, en principio, en el centra de su fachada principal, una escalera de acceso que miraba hacia el centra de la Plaza Ceremonial. Pero la estructura AC 1, que ocupaba precisamente esta posición central, tenía dos escaleras, una al este y otra al oeste. La plataforma del norte AN 2 (Montículo Corcovado) grande y alta, tenía tres escaleras en su fachada sur. Los pequeños “altares” bajos no tenían necesidad dé escalera, puesto que su altura era de un sólo escalón. De hecho el “altar” AC 5 carece de ella. Los “altares” AC 4 y AW 3 tenían una escalera cada uno, pero ésta era naturalmente ficticia. Los peldaños de todas las escaleras tenían huellas de superficie horizontal, de 15 a 25 cm de anchura, formadas por grandes lajas de arenisca. Estos peldaños, de 15 a 25 cm de altura, estaban soportados por contrahuellas verticales, de guijarros y de estuco. Cada contrahuella estaba formada por dos ο tres hiladas de guijarros superpuestos.
55La anchura de las escaleras (salvo las ficticias de los “altares”) variaba entre 2.50 y 5.25 m. Esta anchura era más ο menos proporcional al diámetro de las estructuras redondas ο a la anchura de la fachada de las otras. La mayoría de las escaleras de la Plaza Ceremonial (15 de 23) estaban bordeadas a cada lado por un muro frágil y delgado construido de guijarros superpuestos y estuco. Sin embargo, 6 de las estructuras tenían escaleras más lujosas que las demás, con “rampas” laterales de mampostería y superficie inclinada. Casi todas estas rampas, cuya anchura variaba entre 0.50 y 1 m, estaban construidas con guijarros y mortero de cal. Sin embargo, las de AC 2 estaban parcialmente construidas con lajas de arenisca. Es interesante destacar que las nueve escaleras provistas de rampas eran las de las tres plataformas principales del centra (AC 1, AC 2 y AC 3), las de las tres escaleras de la gran plataforma del norte (AN 2) y las de las dos plataformas redondas del noroeste (AW 1 y AW 2). Cabe suponer que estas rampas eran elementos arquitectónicos de prestigio.

56Casi todas las escaleras de la Plaza Ceremonial hoy en día están en muy mal estado de conservación debido a la fragilidad de sus múras laterales y sobre todo porque las lajas de arenisca de sus escalones con frecuencia fueron removidas para darles otro uso. Los escalones estaban recubiertos de estuco del cual recuperamos algunos vestigios.
e) REVESTIMIENTO EXTERIOR DE ESTUCO DE LOS MUROS DE CONTENCIÓN Y DE LAS ESCALERAS
57Ya fueran de guijarros ο construidos con lajas, los muros de contención solían estar cubiertos por un revestimiento exterior de mortero de cal ο “estuco”. Casi todos estos revestimientos de los muras se encontraron en muy mal estado de conservación. Pero es probable que antaño los remozaran periódicamente y que su superficie exterior estuviera cuidadosamente alisada y a veces decorada con pinturas. El revestimiento de estuco del muro norte de la estructura AW 5 (montículo de los Frescos), por fortuna protegido por la tierra de los escombros, todavía mostraba en 1963, los restos de un decorado pintado en rojo oscuro. Por otra parte, se descubrieron en algunas partes de la excavación, diversos fragmentos de estuco también decorados con pinturas. Ninguno de ellos se encontraba en su lugar, lo que nos hace pensar que adornaban la parte superior, casi siempre derrumbada, de los muras del perfil complejo en “talud y tablera”. La cornisa del muro sur de AW 6 conservaba una pequeña parte de su revestimiento de estuco de superficie lisa con restos de pintura de color rojo oscuro.
10. PINTURAS DE LOS REVESTIMIENTOS DE ESTUCO
58El mortero de cal, que convencionalmente llamamos “estuco”, desempeñaba en Tamtok un papel esencial en la construcción de los muros de contención hechos con guijarros. Pero este estuco tenía sobre todo una función arquítectónica de revestimiento que daba a las plataformas una superficie lisa y blanca, a veces decorada con pinturas. Así pues, existían revestimientos de muras ο de escaleras con superficies más ο menos verticales ο inclinadas y revestimientos de piso con superficies más ο menos horizontales.
59El revestimiento se incorporaba a los muras construidos con guijarros, a medida que se iban levantando. Pero al parecer en los muros de lajas planas, se añadía después de haber sido terminados. Todos estos muras, en general estaban ligeramente inclinados, salvo en la parte vertical de los “tableras”, pero podía haber muros muy inclinados, como los de AN 2. El espesor del revestimiento de los muros era variable. Alcanzó su máximo en el terminado de algunas escaleras, en las cuales se esforzaban por redondear los ángulos entre los peldaños y las contrahuellas y con las rampas. Las rampas laterales anchas de algunas escaleras, como las de AC 1 y de AN 2, presentaban superficies inclinadas que también se estucaban.
60Casi todas las plataformas de la Plaza Ceremonial nos han mostrado restos de revestimientos de muros ο de escaleras todavía en su sitio, pero las superficies de estos revestimientos habían sido alteradas por la intemperie y no mostraban decoración alguna. Como excepción, el muro norte de AW 5 (montículo de los Frescos) había conservado una parte de su revestimiento de estuco con restos de pintura rojo oscuro. Por otra parte, unos 20 fragmentos de estuco pintado fueron encontrados, en forma aislada y dispersa, entre los escombros ο en el relleno de algunas plataformas. Pensamos que provenían de los revestimientos de los muros. La decoración de estos fragmentas siempre estaba pintada en rojo sobre fondo blanco y a veces con algunos detalles en negro ο en azul grisáceo. Estas fragmentas de estuco pintados se encontraron en las siguientes estructuras, todas ellas situadas en la mitad norte de la Plaza Ceremonial: AC 1, AC 3, AW 2, AW 4, AW 5, AW 6, AE 2, AE 3, AE 4, AN 1 y AN 2. Excepcionalmente, en AC 2 (montículo de la Estela) se encontró un fragmenta de estuco aislado con una decoración muy sencilla formada por dos líneas incisas.
a) FRESCOS DEL MURO NORTE DE AW 5 (MONTÍCULO DE LOS FRESCOS)
61Esta pintura mural, que convencionalmente llamamos “fresco”, según el uso común de los arqueólogos en México, fue descubierta el 11 de febrero de 1963. Fue cuidadosamente calcada in situ por la señorita Fraud y después levantada por. el señor Castillo Negrete que se encargó de trasladarla a México en abril de 1963 al depósito de frescos del Inah.
62El muro norte de la plataforma AW 5 está construido de manera burda con lajas ο piedras de arenisca caliza y con tierra arcillosa en lugar de mortero. El fresco se conservaba tan sólo en ciertas partes, donde algunas piedras del muro habían conservado su revestimiento de estuco en bastante buen estado. Un primer lote de estas superficies conservadas se encontraba a la izquierda, cerca del extremo oeste del muro y cubría una superficie de 15 x 20 cm. Más a la derecha, se hallaron dos piedras que conservaban todavía su estuco pintado. Por último, completamente a la derecha, cerca de su extremo sur, el muro había conservado una gran parte de su fresco en más de un metro de longitud y una altura que a veces alcanzaba 30 cm. Pero este conjunto estaba formado de fragmentas más ο menos separados, cuyas posiciones recíprocas habían sido levemente desplazadas por los diversos hundimientos del terreno. Su levantamiento necesitó, por tanto, un cierto trabajo de reconstitución.
63Este fresco fue trazado por una mano bastante firme. Su color rojo oscuro procede sin duda de algún óxido de hierro. Están principalmente formados por trazos ο fajas rectas horizontales ο verticales, rara vez oblicuas. También se perciben algunos círculos concéntricos, ciertas líneas curvas y círculos ο espirales. Los trazos tienen aproximadamente 2 mm de ancho. La anchura de las fajas es de 7 a 15 mm, pero también pueden ser de unos 4 cm. Las líneas curvas no llegan a 1 cm de ancho. La factura recuerda la de la decoración de las grandes piezas de la cerámica Huasteca Negro sobre Blanco del Postclásico Tardío aun cuando los motivos no son los mismos. Recuerda también la del famoso fresco de Consuelo, cercano a Tamtok y publicado por Du Solier (1946); pero con la diferencia de que el fresco de Consuelo es figurativo, con numerosos personajes, mientras que el de Tamtok es abstracto. Los elementos de comparación son escasos.
64El más característico es el glifo de las plumas que está muy presente en Consuelo (Du Solier, 1946) y que se vuelve a encontrar en Tajín (Kampen, 1972, p. 57 y fig. 27 Β). El motivo del círculo con un círculo concéntrico es menos típico pues representa en muchas partes, la cuenta de jadeíta que ya era el símbolo de la gota de agua en la época de Teotihuacán (Von Winning, 1987, p. 11). El motivo de la voluta, (“scroll”), probable símbolo de las olas, aparece en un fragmenta del fresco de Tamtok, pero no se encuentra en Consuelo más que en las grecas escalonadas. Las volutas que son tan importantes en el bajorrelieve de Tajín y en la decoración de los “yugos, palmas y hachas” del arte clásico del centra de Veracruz, aparecen también en las estelas de Tamtok. En cuanto al detalle de los trazos finos oblicuos que parten de una línea recta más importante, se encuentran tanto en Tamtok como en Consuelo pero no es muy característico.
AW 5
Frescos, fragmentos
Fresques, fragments

AW 5. Muro norte
Mur nord

Representaciones de plumas
Représentations de plumes
b) FRAGMENTOS DE ESTUCO PINTADO PROCEDENTES DE DIVERSOS MUROS
65A pesar de la sencillez de su arquitectura, las plataformas de la Plaza Ceremonial de Tamtok debieron de estar ricamente ornamentadas a juzgar por los aproximadamente 22 fragmentos de estuco pintado encontrados aisladamente en la tierra de sus escombros ο de su relleno. La cara interna de algunos de estos fragmentos todavía conserva la huella de los muros que recubrían. Su cara externa siempre está muy lisa, lo que plantea un pequeño problema técnico pues no se ha descubierto localmente ningúna herramienta para alisar el estuco. El decorado está pintado sobre este fondo blanco. El principal color, siempre presente y dominante, es un rojo un poco oscuro (Munsell 10 R 4/6), seguramente hecho a base de óxido de hierro. Pero 5 de los 22 fragmentos, es decir 20%, presentan marcas de policromía representadas por el color negro ο azul oscuro de algunos detalles (contornos y trazos aislados) ο de algún reducido número de superficies. Los motivos son casi siempre abstractos y de carácter geométrico. Los únicos motivos figurativos son tres flores de cuatro pétalos y una minúscula (y dudosa) cabeza de pájaro. A continuación describiremos los 12 fragmentos más importantes pintados, según el orden de localización de los edificios de donde proceden.
Pinturas de AC 1 (montículo de las Dos Escaleras)
66Tres fragmentos pintados solamente en rojo. Uno de ellos AC 1 (1) muestra una especie de espiral pedunculada; el otro, AC 1 (2), los restos de un círculo con un punto redondo en el centro.
67AC 1 (3) muestra pequeños y finos trazos que parten de una línea recta bastante gruesa, que es lo que hemos visto en el fresco de AW 4.Un pequeñísimo detalle es quizá la representación estilizada de una cabeza de pájaro.
Pinturas de AW 2 (La Torre)
68Esta plataforma porporcionó cinco fragmentos de estuco pintados de los cuales tres tienen decorados policromos.
69El fragmenta AW 2 (1) presenta un motivo rojo rodeado de negro que evoca de una manera impresionante las grecas escalonadas del fresco de Consuelo, pero sin su espiral principal.
70El gran fragmenta AW 2 (2), policromo, de 15 x 20 cm, presenta los restos incompletos de dibujos en líneas curvas, inscritos en un gran motivo circular. La policromía está marcada por dos líneas de contorno y sobre todo por una ancha franja azul oscuro recargada con pequeños cuadritos blancos de los cuales uno tiene un punto central azul.

AW 2

AC I
71El fragmenta AW 2 (3), policromo, muestra tres grandes curvas paralelas así como gruesos puntos redondos, y dos hermosos ejemplos de círculos concéntricos con un punto central redondo.
72El fragmenta AW 2 (4), pintado solamente en rojo, muestra sobre todo, una oposición entre líneas rectas horizontales ο verticales.
Pinturas de AW 4 (montículo del Cerón)
73El fragmento AW 4 (1), policromo, es único pues presenta una ancha faja de color azul oscuro cargada de motivos que parecen representar flores estilizadas de cuatro pétalos.

AW 4-1. Estuco policromo Stuc peint polychrome
Pinturas de AW 5 (montículo de los Frescos)
74Los dos fragmentos AW 5 (1) y AW 5 (2) nos muestran nuevos ejemplos de círculos con un gran punto redondo en el centro.
Pinturas de AW 6 (montículo de las Tortugas)
75El fragmenta AW 6 (1) es el más grande de todos los pedazos de estuco pintado encontrados en Tamtok; 17 x 25 cm. Su decoración, pintada únicamente en rojo, es puramente geométrica. Está formada por líneas ο fajas horizontales que se oponen a líneas ο fajas verticales.

AW 5

AW 6 (1)
Pinturas de AN 2 (Montículo Corcovado)
76El fragmenta AN 2 (l) está pintado solamente en rojo. Su decorado geométrico opone líneas ο fajas horizontales a líneas ο fajas verticales. Pero las líneas delgadas comprendidas entre las dos franjas principales paralelas forman el motivo de la greca escalonada de una manera muy diferente a la del fresco de Consuelo.
77A este respecto, podemos destacar de paso, que la greca escalonada, tan extendida a través de la zona cultural mesoamericana, parece estar ausente en la escultura clásica del centro de Veracruz: Tajín, yugos, hachas y palmas.

AC 2

AN 2 (1)
c) FRAGMENTO DE ESTUCO CON DECORACIÓN GRABADA
78Este minusculo fragmento de estuco decorado grabado se encontró entre los escombros de AC 2 (montículo de la Estela), cuando se despejó la escalera. Muestra una superficie externa blanca, muy lisa, sobre la cual se grabaron, en seco, dos líneas que probablemente formaban parte de un motivo no figurativo. Aunque no es seguro, no podemos descartar la posibilidad de que este fragmento haya sido parte de un revestimiento de piso y no de un revestimiento de muro. Las pequeñas dimensiones de este fragmento (3.2 x 4 cm) y su carácter excepcional, no nos permiten decir más sobre él.
11. PINTURAS DE LOS PISOS DE ESTUCO, REVESTIMÍENTOS DE SUELOS
79En la excavación de las plataformas de la Plaza Ceremonial, nos percatamos de que su superficie superior casi siempre estaba cubierta, en partes ο totalmente, por un nuevo revestimiento de estuco cada vez que se hacía una superposición al edificio. Cuando la plataforma soportaba una casa ο un templo, el revestimiento se colocaba después de construir los muros, que eran de madera y de bajareque. Por regla general, tan sólo el piso del interior de la casa estaba estucado; pero cuando el del exterior también lο estaba, había entre los dos, lo que era el ancho del muro a excepción de donde se encontraba el umbral. Los sencillos altares (salvo AC 4) también estaban cubiertos de estuco y uno de ellos (el de AC 3), mostraba la huella de un hoyo donde se había clavado el pivote de una estatua de piedra. El piso de las casas casi siempre presentaba una concavidad que servía de fogón.
80Estos revestimientos de piso de estuco equivalían al enlosado, el enladrillado ο los mosaicos, ornamentados ο no, de las casas ο de los templos de la antigua Europa. En Tamtok, la mayoría de ellos eran blancos. Pero en otras partes de la Huasteca se han encontrado revestimientos de piso pintados. Cerca de Tampico, en el sitio de Las Flores, existe una plataforma alta, que excavó Ekholm, que tenía 26 pisos de estuco superpuestos, de los cuales tan sólo dos estaban pintados uniformemente de rojo. En otra plataforma del mismo sitio, John Muir (1926) pudo estudiar dos revestimientos de piso superpuestos sobre cada uno de los cuales estaba pintado un conjunto de numerosas pequeñas casillas del juego de azar que los aztecas llamaban patolli y que se jugaba un poco como nuestro juego de la oca. Sobre las 23 plataformas de la Plaza Ceremonial de Tamtok, seis de ellas mostraban revestimientos de piso adornados con pinturas: AW 2, AW 4, AS 4, AE 2, AE 3 y AE 4. Su distribución parece ser fortuita.
81Tres de las casas tenían los pisos interiores pintados: AW 2 (1), AE 2 y AE 3.
82Dos de las casas tenían pisos exteriores pintados: AW 2 (2) y AW 4.
83Dos de las casas tenían los pisos pintados por fuera y por dentro: AS 4 y AE 4.
84En Tamtok esas pinturas en pisos de estuco son muy sencillas. Aquí damos un sólo ejemplo de ellas, el de AW 4 y remitimos a las descripciones anteriores de cada plataforma.

12. OFRENDAS RITUALES
85De los 23 edificios de la Plaza Ceremonial, nueve, es decir un poco menos de 50%, contenían ofrendas rituales aparentemente hechas durante su construcción. Estas fueron las estructuras AC 4, AS 1, AW I, AW 2, AW 5, AS 2, AS 4, AE 1 y AE 4. La ofrenda podía ser colocada a una profundidad variable en relación con el revestimiento de piso previsto. Había tres soluciones posibles: una era colocar sencillamente la ofrenda sobre el estuco ο sobre el suelo que se recubriría de tierra, tal es el caso de AC 4, de AS 1, de AS 2 y de AS 4 (Of 2). Otra es que podían colocar la ofrenda por debajo, ya fuera perforando el estuco ο utilizando la apertura de la concavidad que hacía las veces de fogón, como es el caso de AS 4 (Of 1), de AE 1 y de AE 4. Y la última es que podían esperar el comienzo de la superposición y colocar la ofrenda en la nueva capa de tierra, como es el caso de AW 1 y AW 2.
86Algunas de estas ofrendas, sobre todo en los niveles inferiores, probablemente no las pudimos encontrar en nuestras excavaciones. Sin embargo, parece ser que las dos estructuras principales, AC 1 y AC 2, carecían de ofrendas, lo cual puede estar relacionado con el hecho de que estas dos plataformas eran esencialmente de uso ritual y no soportaban casas habitación. El caso de AC 3 (Montículo Redondo) es reservado, puesto que su parte superior había desaparecido y no pudo mostrar superposición alguna. Sin embargo, el altar de AC 4 que no fue realzado, tenía su ofrenda interior. En cuanto a las estructuras AW 4, AW 6, AS 3 y AE 2, al parecer no fueron excavadas con suficiente cuidado ο en forma completa. El cuadro que aparece más abajo nos da el detalle de estas ofrendas, a medida que fueron encontradas. Los elementos constitutivos de estas ofrendas que son prácticamente todos de la época postclásica tardía, fueron descritos en los capítulos dedicados a cada uno de los edificios de la Plaza Ceremonial. Algunos objetos aislados, que hemos considerado como parte de las ofrendas, quizá no lo fueron en realidad. Tal podría ser el caso del vaso miniatura que representa a Quetzalcóatl encontrado en AW 5. No tomamos en cuenta ni la plaquita de piedra verde pulida de AW 4 ni el brasero de AW 6 ni la punta de pedernal de AN 1.
87A excepción, quizá, de la de AC 4, todas estas ofrendas parecen haber tenido el fin de sacralizar el sitio de una casa habitación. Es notable comprobar que éstas no están presentes en las dos plataformas principales centrales, AC 1 y AC 2, cuyo uso era únicamente ceremonial. Entre los indios huastecos de hoy en día, la casa habitación conserva todavía un carácter sagrado que se confirma por rituales de inauguración. Casi todas las casas descubiertas en Tamtok eran de planta circular. Ahora bien, en la Huasteca Potosina, la casa redonda representa la forma tradicional del mundo.
88La mayor parte de las ofrendas que encontramos así, no tenían gran importancia y eran poco variadas. La más interesante fue la que se halló en el nivel más antiguo de AS 2 (montículo de las Piedras), estructura que parece haber tenido un carácter ritual muy marcado. Al centra se encontró un círculo de guijarros y de vasos miniatura, cáscaras de huevo, una pequeña trompa de caracol marino, una minúscula vasija efigie, una punta foliácea de pedernal blanco, una punta foliácea de pedernal rojo y un fragmento de navajita de obsidiana negra. Quizá la presencia de tres colores de piedra tenía algún simbolismo. Quizá también fue intencional el hecho de que colocaran al norte la pequeña vasija efigie del dios del viento, que los aztecas llamaban Quetzalcóatl Ehecatl.

1. Negro 2. Blanco 3. Rojo
1. Noir 2. Blanc 3. Rouge AE
4. Of. 1
89El material de las ofrendas interiores que nos ocupan está presentado en el cuadro que aparece a continuación. Este material comprendía, esencialmente, pequeñas trompas de caracol marino, puntas de proyectil, vasijas miniatura, algunas ollitas y huevos. Los caracoles marinos, que eran instrumentas de música ritual, estaban presentes en casi todas las ofrendas que contenían varios objetos. Las puntas de proyectil eran todavía más frecuentes, y creemos que en determinadas ofrendas, la posición de las puntas de pedernal de diversos colores fue premeditada. Existen nueve casos de vasijas miniatura simples y dos de vasijas miniatura antropomorfas que representaban al dios del viento que los aztecas llamaban Ehecatl. Podemos añadir, dos ollitas rituales, quizá un poco grandes para considerarlas vasos miniatura, que quizá contenían, alimentas. Tres de las ofrendas contenían huevos, rotos por supuesto, y cuyo número no es siempre fácil de calcular. Una orejera de jadeíta formaba parte de la ofrenda Of 2 de AS 2. En cuanto a la figurilla tipo Pánuco A de AE 1, ya dijimos que representa un problema pues es varios siglos anterior a la ofrenda de la que formaba parte. Podemos, pues, suponer que fue encontrada al azar y reutilizada.
90Falta por saber por qué esos diversos objectos rituales se elegían para formar estas ofrendas. Los caracoles evocaban evidentemente las aguas sagradas del oceano oriental y el cumplimiento de ciertos ritos de invocación de la lluvia, como se puede apreciar en los frescos de Teotihuacán. Las puntas de proyectiles que son reminiscencia de la guerra, quizá tenían como meta apartar los peligros que pudieran amenazar. Las vasijas miniatura son siempre diminutivos de vasos de agua, ollas ο cántaros pintados que eran símbolos de agua y que se consideraban amigos y de-fensores de los hombres contra los peligros míticos. Tenían, por lo tanto, una función protectora. En cuanto a los huevos, cuyos restas de las cáscaras han sobrevivido a veces, eran generalmente huevos de pava. Quizá tenían un valor simbólico, pero se puede también pensar que formaban parte de ofrendas alimenticias de maíz y de carne de las cuales ya no quedan vestigios.

AS 4. “Pánuco A”
91Sería interesante comparar las ofrendas de las plataformas de Tamtok con las de otros sitios de la Huasteca, pero los datos con que contamos no son suficientes. De todos modos, cabe hacer notar que al hacer una excavación de una pequeña plataforma redonda en Vista Hermosa, sitio postclásico tardío del noroeste de la Huasteca, se encontró, a poca profundidad, una ofrenda central constituida por una valva de concha y tres vasijas miniatura. El sitio postclásico temprano de Las Flores, cerca de Tampico tenía numerosos revestimientos de piso de estuco, sin ofrendas. En cuanto al sitio de San Antonio Nogalar, de la época clásica media, mostró pisos de tierra quemada, pero no se hallaron ofrendas.
Ofrendas de las plataformas de la plaza ceremonial de Tamtok

13. OFRENDA EN LA PLAZA, CERCA DE LA GRAN PLATAFORMA AS 1
92Esta importante ofrenda fue descubierta en el propio suelo de la Plaza Ceremonial, a poca profundidad, a 2 m al norte del muro norte de la plataforma AS 1 (del montículo de la Laguna). Al parecer estaba más bien destinada a la plataforma que a la plaza en sí.
93Constaba de un depósito de 54 vasijas miniatura de cerámica del tipo Huasteca. De estas 54 vasijas, 52 eran pequeñas ollas para agua y dos de ellas, pequeños cántaros con asas laterales, como ya se detalló cuando se habló de AS 1. La intención era ciertamente ofrecer reducciones de las vasijas que Servían para transportar agua. Esta cerámica, que no se utilizaba para cocinar, no padeció el suplicio del fuego y por tanto estaban consideradas como poseedoras de buenos sentimientos para los hombres. Es probable que una ofrenda tal expresara una petición de lluvia. Es posible, pero poco verosímil que las 52 pequeñas ollas para agua simbolizaran el ciclo de 52 años del calendario ritual mesoamericano.
14. RITOS Y OFRENDAS FUNERARIAS
a) LAS TRES PLATAFORMAS QUE CONTENI’AN ENTIERROS
94En tres de las esculturas de la Plaza Ceremonial se descubrieron entierros en condiciones de yacimiento muy diversas. Estas tres estructuras se encuentran en el centro de la plaza ο en sus inmediaciones, lo que demuestra el interés que se les prestaba. Todas ellas tenían un carácter ritual y no estaban destinadas a soportar casas habitación.
b) LOS SIETE ENTIERROS DE AC 1 (MONTÍCULO DE LAS DOS ESCALERAS)
95Esta plataforma, situada en el centro mismo de la plaza, contenía siete entierros, todos ο casi todos en position fetal ο flexionada. Tan sólo dos de ellos se encontraban al interior de la plataforma, en la parte superior central de su relleno interno. Uno de ellos, S 7, era de un infante de 3 a 5 años y no tenía mobiliario funerario. El otro, S 6, pertenecía a un individuo de 12 a 13 años, probablemente de sexo femenino, a los pies del cual se había colocado una vasija con cuello vertedor y un caparazón de tortuga terrestre. Los otros cinco entierros se encontraban en dos banquetas de tierra añadida posteriormente al pie de las dos escaleras. Del lado este habían sido sepultados en forma sucesiva, dos infantes, uno, S 1, de 3 a 5 años que debía ser femenino de familia rica pues su mobiliario contenía un metate, piezas de vajilla y dos plaquitas de jadeíta pulida. La otra, S 2, era de un individuo de corta edad. La banqueta de tierra del lado oeste nos proporcionó sobre todo el esqueleto S 3, de un adulto masculino de 20 años, con los dientes limados y con una plaquita de jadeíta pulida. A cada lado de este adulto estaba enterrado un infante, uno de ellos, S 4, con una cuenta de imitación de jadeíta y el otro, S 5, con una cuenta análoga y con una plaquita, esta si de verdadera jadeíta. En conjunto, las sepulturas de AC 1 parecen haber estado reservadas sobre todo a infantes de un estrato social bastante alto, así como a un adulto joven, también de condición social acomodada.
c) LA PLATAFORMA AC 2 (MONTÍCULO DE LA ESTELA)
96Esta plataforma, cercana a la anterior, no contenía entierros. Pero justo al norte de su escalera se descubrió una tumba colectiva donde habían sido enterrados 12 ó 13 individuos, pero en forma sucesiva, en el transcurso de un periodo de tiempo probablemente bastante largo. Todos estaban en position decúbito ventral, lo que nos hace pensar que habían muerto en condiciones anormales, quizá asesinados ο sacrificados. Todos eran adultos, casi todos de sexo masculino. Su mobiliario funerario no contenía más que pequeñas vasijas miniatura y numerosas puntas de flecha de pedernal, poco atribuibles a un individuo en especial.
d) SEPULTURA (?) SIN ESQUELETO DE LA PLATAFORMA AW 5 (MONTÍCULO DE LOS FRESCOS)
97Esta plataforma, muy particular, parece haber sido un túmulo funerario importante, cuyos muros de contención estaban adornados con frescos. Al centro de esta pequeña plataforma rectangular, bajo un depósito de 16 m2 de bloques de pudinga, se descubrió un conjunto de objetos diversos entre los que se encontraba un metate, un tejolote, cerámica doméstica, dos vasijas rituales con vertedera, una pequeña vasija miniatura, cinco puntas de proyectil foliáceas, de pedernal, una pequeña trompa de caracol marino, un cascabel de concha de Oliva, varios guijarros y por último, una pequeña vasija efigie que probablemente representaba al dios del viento Quetzalcóatl Ehecatl. Entre estos diversos objetos, mas no en las vasijas, se encontraron algunos dientes humanos y pequeños fragmentas óseos que tenían marcas de fuego. Esta nos hace pensar que probablemente se trataba de una sepultura de incineración, lo cual es excepcional en la Huasteca. El detalle de las ofrendas de esta tumba, como en el caso de las anteriores, se describió más arriba cuando se habló del edificio donde se encontraba.
e) DATOS GENERALES SOBRE LOS RITOS FUNERARIOS DE LA HUASTECA
98Cabe destacar que en los entierros de Tamtok, la cabeza nunca está protegida con una escudilla de cerámica, como lo estaba por ejemplo en Ébano y en la isla del Ídolo.
99De los trabajos de Du Solier (1947) y del “Proyecto Arqueológico Huasteca” (L. Merino y A. García Cook, 1987), podemos deducir que los huastecos practicaban la inhumación de los cadáveres desde los tiempos preclásicos. Generalmente enterraban a sus muertos en posición fetal (flexionados), pero a veces, aunque con menos frecuencia, en decúbito dorsal (acostados de espaldas). En Tamtok, el entierro en decúbito ventral es particular en la tumba colectiva de AC 2 y al parecer se debió a las condiciones especiales del deceso. Sin embargo, en las excavaciones del sitio de Vista Hermosa, realizadas en 1965-1967 por la Misión Francesa, se vio que el entierro en decúbito ventral podía ser una práctica individual bastante común.
100Lo que parece completamente anormal en la Huasteca es la incineración de los cadáveres. Sin embargo, Du Solier destaca que la excavación de un montículo de Ébano le permitió descubrir un nivel profundo formado por una capa espesa de cenizas, de 25 cm, que contenía fragmentas de cerámica y una gran cantidad de restas de cráneos humanos semicalcinados. Pero en este caso no se trataba de un verdadero modo de sepultar.
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